Rosa Pérez y
Juan Ramírez son dos trabajadores que realizan la misma labor, pero tienen
remuneraciones diferentes. En este caso, Juan gana mucho más que Rosa. Esta
brecha salarial entre hombres y mujeres representa un 28,6%, según el IX
Informe de Cumplimiento de la Ley de Igualdad de Oportunidades (LIO) al 2015.
Ante esta
situación, la Comisión de Mujer y Familia del Congreso aprobó por unanimidad el
predictamen de los proyectos de ley 343/2016-CR, 636/2016-CR y 972/2016-CR, que
buscan garantizar la igualdad entre mujeres y hombres en el ámbito laboral.
Y es que los
estudios presentan cifras y datos que visibilizan las brechas de género y la
desigualdad real que enfrentan las mujeres en este ámbito.
amplia diferencia
El ingreso
promedio mensual por trabajo de mujeres y hombres al 2015 corresponde a S/
1.305 con una diferencia desfavorable para las mujeres, quienes perciben en
promedio S/ 1.052,7 y los hombres S/ 1.475,3. Es decir, 28,6% menos de ingreso
para las mujeres.
Respecto a la
participación en la microempresa, la población económicamente activa (PEA)
ocupada por las mujeres es 44,3%, a diferencia de los hombres que es 55,7%. En
la pequeña empresa la PEA ocupada por las mujeres es 36%; los hombres
representan el 64%. (Ver infografía).
En el caso de la
participación de las mujeres y los hombres en el sector público y privado, los
primeros tienen mayor participación en el mercado laboral. Ellos representan el
54,1% en el sector público y el 65,7% en el sector privado, según la Autoridad
Nacional del Servicio Civil (Servir) en su Informe sobre la Mujer en el
Servicio Civil Peruano 2017.
En los últimos
once años, en el servicio civil peruano, los hombres han ganado, en promedio,
16% más que las mujeres. Sin embargo, resalta que entre los años 2014 y 2015 la
brecha remunerativa de género se redujo de 18% a 16%.
A nivel mundial,
según Women CEO Perú - Centrum Católica, las mujeres representan cerca del 40%
de la mano de obra mundial, es decir, del total de 3.000 millones de
trabajadores en el mundo, unas 1.200 millones son mujeres.
Esta cifra no se
visualiza a nivel global, ya que en este nivel la participación de las mujeres
en los puestos directivos pocas veces supera el 20%. Incluso baja hasta 2% o 3%
en las empresas grandes.
Sin diferencias
Indira Huilca,
presidenta de la Comisión de Mujer y Familia, sostiene que la idea es que las
empresas del sector privado tengan en su estructura interna una categoría
funcional definida para sus trabajadores.
“La empresa
define su propia política de salarios. Lo que no puede hacer es una diferencia
respecto a lo que paga a un trabajador hombre y a una mujer cuando realizan la
misma función”, dijo.
Este predictamen
propone que la entidad empleadora, en sus planes de formación profesional y de
desarrollo de capacidades laborales de sus trabajadores, garantice la igualdad
entre mujeres y hombres.
También prohíbe
que la entidad empleadora despida o no renueve el contrato a las mujeres
trabajadoras por motivos vinculados con el embarazo o el periodo de lactancia,
según lo previsto en el convenio de la OIT. ❧
Hay que saber
cómo se aplicará
La ex ministra de Desarrollo e Inclusión Social,
Carolina Trivelli, señaló que la aprobación de este proyecto en la Comisión da
una buena señal al país. Sin embargo, dijo que lo importante es conocer cómo se
aplicará la norma.
“Si hay una queja por la diferencia salarial entre
un hombre y mujer, ¿quién será el encargado de recibir dicha queja y cómo se va
a probar? La única explicación en la diferencia salarial es la discriminación y
contra ello debemos pelear todos”, manifestó Trivelli.